miércoles, 1 de febrero de 2012

Noticia

Ya esta bien, hombre. Ya esta bien! 

Ya preparan otra mangancia los políticos de las cajas. Las han dejado arruinadas y ya preparan otra inyección de dinero para que sigan chupando de la borrega todos los inútiles directivos políticos que las gobiernan. Son una plaga!

No se cuando la gente se va a dar cuenta de que tienen que sacar el dinero y llevarlo a la banca privada. Es una pena con la obra social que desarrollan las cajas. Pero con la excusa les estan haciendo el juego a estos parásitos políticos. 

¿Por qué no hay un fondo de rescate para empresas que han tenido que cerrar dejando a cientos de miles de trabajadores?

¿Es que las cajas no pueden quebrar?

¡Ah! Pero las empresas si pueden.... 

 

 

El Gobierno planea recapitalizar las cajas con préstamos del fondo de rescate


El Gobierno ha empezado a explicar al sector financiero los planes de su reforma del sector. El Ministerio de Economía planea exigir a las entidades no solo que aumenten las provisiones sobre los pisos, promociones y solares que se han quedado por el impago de los créditos, sino también que provisionen parte de los préstamos al sector del ladrillo que están al corriente de pago. Se baraja exigir una provisión genérica del 7% por estos créditos. En paralelo, el Gobierno incentivará las fusiones dando más tiempo a las que se integren para limpiar sus balances (dos años en lugar de uno) y facilitando recursos a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) que computarán como capital, pero serán una especie de préstamos a devolver por las entidades.

Se endurecerán las provisiones para créditos morosos y subestándar del ladrillo
En gran medida, el plan del Gobierno se parece al primero que puso en marcha el Gobierno socialista y que provocó una oleada de fusiones entre las cajas. Como entonces, el dinero se prevé inyectar a través de participaciones preferentes a un tipo próximo al 8% anual que las entidades deben devolver pasados unos años. Las entidades podrán usar esos recursos para reestructurarse y limpiar su balance, como hicieron en la anterior oleada de fusiones.
En la jerga del sector, esa fórmula de recapitalización se conoce como FROB1, a diferencia del FROB2, que supuso la inyección directa de capital en las entidades que no fueron capaces por sí mismas de alcanzar un determinado listón de solvencia. Con el dinero del FROB2 se nacionalizó CatalunyaCaixa, Unnim y Novacaixagalicia. En cambio,  han recibido dinero del FROB1 las cajas fusionadas en entidades como BFA-Bankia, Banco Mare Nostrum o Liberbank. Para los gestores de las entidades, la opción del FROB1 resultó mucho más cómoda.

Almunia avisa que deberán rendir cuentas en Bruselas

El vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, ha avisado de que recurrir al FROB será considerado por Bruselas ayudas públicas, también las ayudas que puedan obtener las entidades a través del Fondo de Garantía de Depósitos. Ello significa, según ha explicado, que las entidades que requieran asistencia deberán presentar un plan de reestructuración al Ejecutivo comunitario y lograr su autorización.
El dinero inyectado en las entidades facilitará que se doten mayores provisiones por el riesgo inmobiliario. Se exigirá sobre todo que se cubra el riesgo de posibles pérdidas en el suelo y promociones que estén paradas, para los que se podrían exigir provisiones de hasta el 80% del valor original de los terrenos. Para los pisos en propiedad de los bancos, se baraja exigir provisiones desde un mínimo del entorno del 35%-40%. Con ello, la cobertura total de los inmuebles adjudicados estaría algo por encima del 50%, el nivel que ha cubierto el Banco Santander.
Economía planea también endurecer las provisiones para los créditos al sector promotor e inmobiliario. Las entidades ya están obligadas a provisionar parte de los créditos morosos y de los considerados subestándar, que están al día, pero que se consideran en riesgo de impago. Ahora se endurecen las provisiones por créditos subestándar (que eran del 10% del valor del préstamo) y además se prevé exigir también una provisión por los créditos que hasta ahora se consideraban sanos, esto es, al corriente de pago y sin perspectivas de impago. Esa nueva provisión, que equivale a considerar subestándar a todo el sector, sería del entorno del 7%, según los planes que maneja Economía.

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