entre toros y fútbol
La crisis se cuela como auténtica 'Marca España'
A. R-H
Miércoles, 18. Febrero 2015 - 13:59
Toros,
fútbol, sol, flamenco, siesta y...crisis. La imagen de España en el
exterior consolida su recuperación a pesar de que la crisis ya es
también 'Marca España'.
Esta oleada del BIE (diciembre 2014-enero 2015) demuestra que la recuperación de la imagen de España en el exterior se consolida y mantiene los mismos 6,9 puntos registrados en diciembre de 2013, lo que siguen situándola por detrá tanto de Italia como de Alemania, aunque por delante de Grecia. Son muchos los encuestados alemanes y franceses que mencionan la crisis y los problemas económicos y sociales de España.
Las encuestas para la elaboracón del BIE se realizan en diez países (Alemania, Reino Unido, Francia, Estados Unidos, México, Brasil, Corea del Sur, Indonesia, Marruecos y Argelia).
FUENTE:http://www.gaceta.es/noticias/crisis-cuela-toros-futbol-marca-espana-18022015-1359
'España en el mundo durante 2015'
La 'burbuja de pesimismo todavía no ha explotado'
A. R-H
Miércoles, 18. Febrero 2015 - 14:53
El
Real Instituto Elcano sostiene que la 'burbuja de pesimismo' en España
aún no ha estallado y que 'la mejoría económica y de la imagen-país no
oculta el malestar social y político'.
El Real Instituto Elcano (RIE) presentará el próximo día 24 su trabajo 'España en el mundo durante 2015: perspectivas y desafíos',
un informe colectivo que realiza por tercer año consecutivo todo
el equipo investigador del Instituto para ofrecer su visión sobre lo que
el futuro inmediato puede deparar a la acción exterior y la
internacionalización de España.
En la presentación del trabajo, que firma el presidente del RIE, Emilio Lamo de Espinosa, se prevé que "tras años de graves dificultades, que no desaparecerán rápidamente, parece que se instala en España cierto clima de expectativas algo mejores (más económicas que políticas), pero en un complejísimo contexto nacional de elecciones múltiples. Y en un contexto internacional de inmensas transformaciones, muchas (las más) positivas, en forma de desarrollo, y de esperanzas concretas (en Irán, Túnez o Cuba), pero también de conflictos (destacando Ucrania y el eterno Oriente Medio, que se mueve hacia el oeste por la orilla sur del Mediterráneo), e inquietantes retos multilaterales (pandemias, cambio climático, radicalización, pobreza y desigualdad). Retos que afectan muy especialmente al proyecto europeo, asaltado desde dentro por neo-populismo y neo-nacionalismos y la amenaza del Grexit, y desde fuera a través de sus dos fronteras geográficas: la del Este, abierta desde los Balcanes y pasando por Ucrania al Mar Negro y el Cáucaso; y la frontera del Sur, abierta desde Libia a Siria, pero con una amenaza yihadista que circula libremente por el Sahel desde Mauritania a Sudan y más allá.
En las conclusiones del trabajo, a cargo de Charles Powell, director del RIE, se subraya que "2014 no ha sido un año cualquiera para la política exterior española. Sería equivocado incurrir en triunfalismos, pero parece haberse superado un punto de inflexión, de forma que la posición internacional y europea del país habría comenzado a mejorar al ritmo –lento– al que se va recuperando la economía tras más de seis años de crisis. Se han producido, además, dos hitos propios que destacan necesariamente en el balance: la aprobación de un nuevo marco jurídico y doctrinal para la acción internacional de España, y el haber conseguido un puesto no permanente en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas". E insiste en que los españoles se enfrentan "a un mundo inseguro y a una integración europea aún desorientada, al mismo tiempo que tienen ante sí una cita importante con las urnas en unas elecciones que pueden alterar algunos elementos clave del actual sistema democrático. La mejoría económica y de la imagen-país no oculta el malestar social y político que aún caracteriza a España. .[..] A todo ello se enfrentan unos ciudadanos que tal vez no sean del todo conscientes del impacto cada vez más directo que tienen las dinámicas globales y europeas en sus vidas cotidianas y que, debido a la 'burbuja de pesimismo' que todavía no ha explotado, tampoco acaban de creerse que España es un actor importante en esa globalización (a pesar de ser la decimoprimera potencia del mundo en lo que a presencia global se refiere, en un mundo en el que conviven casi 200 Estados)".
Los autores de 'España en el mundo durante 2015: perspectivas y desafíos' reivindican la "necesidad de situar a la ciudadanía española en el centro de la política exterior, y también de apelar a esos ciudadanos para que concedan más protagonismo al escenario exterior y no crean que, para bien o para mal, se puede gobernar sus vidas mirando sólo al pequeño ámbito del país o de su territorio más cercano. Ciertamente, la globalización y la europeización son cada vez más difíciles de gobernar, pero precisamente por ello es necesario esforzarse mucho más al intentarlo"
FUENTE:http://www.gaceta.es/noticias/burbuja-pesimismo-todavia-explotado-18022015-1453
En la presentación del trabajo, que firma el presidente del RIE, Emilio Lamo de Espinosa, se prevé que "tras años de graves dificultades, que no desaparecerán rápidamente, parece que se instala en España cierto clima de expectativas algo mejores (más económicas que políticas), pero en un complejísimo contexto nacional de elecciones múltiples. Y en un contexto internacional de inmensas transformaciones, muchas (las más) positivas, en forma de desarrollo, y de esperanzas concretas (en Irán, Túnez o Cuba), pero también de conflictos (destacando Ucrania y el eterno Oriente Medio, que se mueve hacia el oeste por la orilla sur del Mediterráneo), e inquietantes retos multilaterales (pandemias, cambio climático, radicalización, pobreza y desigualdad). Retos que afectan muy especialmente al proyecto europeo, asaltado desde dentro por neo-populismo y neo-nacionalismos y la amenaza del Grexit, y desde fuera a través de sus dos fronteras geográficas: la del Este, abierta desde los Balcanes y pasando por Ucrania al Mar Negro y el Cáucaso; y la frontera del Sur, abierta desde Libia a Siria, pero con una amenaza yihadista que circula libremente por el Sahel desde Mauritania a Sudan y más allá.
En las conclusiones del trabajo, a cargo de Charles Powell, director del RIE, se subraya que "2014 no ha sido un año cualquiera para la política exterior española. Sería equivocado incurrir en triunfalismos, pero parece haberse superado un punto de inflexión, de forma que la posición internacional y europea del país habría comenzado a mejorar al ritmo –lento– al que se va recuperando la economía tras más de seis años de crisis. Se han producido, además, dos hitos propios que destacan necesariamente en el balance: la aprobación de un nuevo marco jurídico y doctrinal para la acción internacional de España, y el haber conseguido un puesto no permanente en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas". E insiste en que los españoles se enfrentan "a un mundo inseguro y a una integración europea aún desorientada, al mismo tiempo que tienen ante sí una cita importante con las urnas en unas elecciones que pueden alterar algunos elementos clave del actual sistema democrático. La mejoría económica y de la imagen-país no oculta el malestar social y político que aún caracteriza a España. .[..] A todo ello se enfrentan unos ciudadanos que tal vez no sean del todo conscientes del impacto cada vez más directo que tienen las dinámicas globales y europeas en sus vidas cotidianas y que, debido a la 'burbuja de pesimismo' que todavía no ha explotado, tampoco acaban de creerse que España es un actor importante en esa globalización (a pesar de ser la decimoprimera potencia del mundo en lo que a presencia global se refiere, en un mundo en el que conviven casi 200 Estados)".
Los autores de 'España en el mundo durante 2015: perspectivas y desafíos' reivindican la "necesidad de situar a la ciudadanía española en el centro de la política exterior, y también de apelar a esos ciudadanos para que concedan más protagonismo al escenario exterior y no crean que, para bien o para mal, se puede gobernar sus vidas mirando sólo al pequeño ámbito del país o de su territorio más cercano. Ciertamente, la globalización y la europeización son cada vez más difíciles de gobernar, pero precisamente por ello es necesario esforzarse mucho más al intentarlo"
FUENTE:http://www.gaceta.es/noticias/burbuja-pesimismo-todavia-explotado-18022015-1453
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